Todos tenemos derecho a expresar nuestra opinión, pero lo cierto es que no todas las opiniones tienen que ser escuchadas.
Estamos en el mundo de la comunicación, nuestra vida está al alcance de un “clic” y cualquiera con Internet y tiempo libre puede opinar sobre tu vida, tu cuerpo, o tu forma de ser.
Es así. Creemos saberlo todo en base a unas cuantas imágenes o un par de vídeos (a veces ni tan siquiera eso), y al final recibimos comentarios o mensajes de gente que opina que eso de vivir (nuestra vida) ellos lo harían mejor.
Pero no todas las opiniones son válidas o merecen nuestro tiempo y atención.
Lo cierto es que debemos de empezar a ser mucho más selectivos con las opiniones que tenemos en cuenta a la hora de cambiar o simplemente rayarnos un martes cualquiera por lo que me ha dicho Menganito.
En este vídeo te cuento los tres criterios que una persona debe cumplir para que su opinión merezca tu tiempo más que los términos y condiciones de uso de todas las webs del mundo que jamás lees.
- Personas que quieren lo mejor para ti.
- Personas que acostumbran a ser sinceras.
- Personas dispuestas a recibir críticas.
Si no cumple esos criterios, es simple:
NO ME IMPORTA
¿A ti también te rayan las opiniones de los demás?
¡Cuéntamelo en los comentarios!